La entrada artificial al Complejo
Los trabajos de exploración en la Cueva del Barbancho por parte de espeleobuceadores han dado origen a una nueva cavidad artificial. Los exploradores han empleado para su localización, la topografía de la cavidad y un localizador de víctimas de avalanchas (ARVA o LEVA) para ubicar el punto exacto donde excavar.
Texto: Josi Olave
Fotos: Miguel Castro & Roberto F. García
En el mes de septiembre del 2004, cuando se terminó la cartografía de la Galería Seca, ubicada en el Sector Superior de la Cueva del Barbancho, los exploradores vieron que el conducto concluía colmatado por concreción y arcilla, muy cerca de la superficie, en la ladera de Socueto, cercana a la carretera.
A Roberto F. García (Rupo) coordinador de estas exploraciones y Josi Olave, se les ocurrió utilizar el sistema ARVA para localizar desde el exterior el final de la galería y así disponer de una entrada en la que no sería necesario superar los dos sifones de la Cueva del Barbancho, que dan paso a un complejo aun por explorar y que hasta la fecha tiene 3.500 m de desarrollo.
Utilización de los ARVA o LEVA
Los ARVA o LEVA ( Localizador Electrónico Victimas Avalancha ) son unos aparatos electrónicos que se utilizan para localizar victimas de avalanchas de nieve.
Estos emisores-receptores, cuando están en modo transmisión, emiten interrumpidamente en una frecuencia de 475 khz. una señal acústica. En posición de recepción, gracias a su altavoz, se escucha la señal en forma de pitido. También disponen de una antena direccional que al cambiar de posición el aparato permite saber la dirección en la que se encuentra el emisor.
Unos leds, junto al pitido, indican la intensidad de la recepción, siendo esta mayor, cuanto más cerca se encuentra del emisor.
El ARVA dispone de un mando giratorio con la que se puede reducir la intensidad de la señal, indicando la distancia de recepción del transmisor con el receptor.
El sistema que se ha empleado en la búsqueda exacta de la ubicación de la Cueva de Socueto, para así proceder a excavar, se denomina "método en cruz". Consiste en que tras conectar el aparato, se coloca el mando giratorio en la mínima resistencia posible ( > 80 metros), mientras se busca la señal en un pequeño perímetro guiado por las coordenadas UTM obtenidas en la topografía interior de la cavidad. También se han utilizado un radio comunicador modelo TalkAbout200 de Motorota, con una potencia de 500 mW, con lo que se tenia contacto con los buzos ubicados en el interior, lo que indicaba que se encontraban a menos de 5 m de profundidad.
Una vez localizada la señal se camina en dirección recta, siguiendo la dirección de mayor sonoridad y reduciendo lo más posible la intensidad con el mando giratorio.
Cuando el volumen sonoro disminuye se retrocede hasta el punto de máxima intensidad. A partir de ese punto se gira 90º y se camina recto, si el volumen disminuye se da media vuelta, caminando en dirección opuesta y buscando el punto de máxima intensidad. A partir de aquí se vuelve a girar 90º y se repiten los pasos anteriores, hasta que la posición del mando giratorio esta en la mínima distancia posible (0 - 2 m).
Después, pegado al suelo con el ARVA, en un diámetro de 2 m, se ubica el lugar de máxima intensidad. Han sido preciso para localizar esta nueva entrada tres incursiones con los ARVA por parte de los buzos: Álvaro Subiñas, Paúl Cantalapiedra, Miguel Castro, Josi Olave, Fernando Moreno y tres miembros del Cuerpo de Bomberos de Logroño. La primera vez, para localizar el final de la galería, una segunda, para ubicar el punto donde comenzar a excavar, y finalmente, después de realizar una zanja en forma de "L" , de 3 m de profundidad, direccionar la excavación hacia el punto exacto y hacer realidad esta entrada.
Se ha realizado un corte vertical de 3,5 m y 1m de ancho en la ladera de Socueto. Primero fue necesario quitar un 1m de grava y manto vegetal, despues picar 2 m, en roca caliza muy quebradiza pero compacta, con ayuda de un martillo eléctrico y, finalmente romper un costra de 50 cm de concreción, que ha sellado durante miles de años este estrato que en su día estuvo abierto al exterior.
La Cueva de Socueto, tiene el acceso restringido para salvaguardar el acuífero del cual se abastece el municipio de Orbaneja del Castillo. No se trata de una cavidad de acceso cómodo, pues durante los primeros doscientos metros se caracteriza por conductos angostos parcialmente inundados, los cuales en épocas de precipitaciones pueden llegar a sifonarse.
Más información visualizar apartado:Complejo Kárstico de Orbaneja del Castillo.
Agradecimientos al Grupo de Rescate DYA Navarra
